Las piscinas de poliéster son un tipo de piscinas prefabricadas, que nos permiten poder disfrutar igualmente de una piscina, pero de una manera más económica y llevan una instalación mucho más sencilla, puesto que son prefabricadas. Estas piscinas disponen de diferentes diseños y medidas, de esta manera se puede adaptar mucho más al espacio que tengamos y sobre todo a nuestros gustos, criterios y necesidades. Las piscinas de poliéster nos ofrecen una garantía de 10 años de impermeabilidad total, es decir, que es una piscina que tiene una larga vida útil. Para garantizar esta vida útil se utilizan pinturas y fibras de vidrio de alta calidad y de esta manera poder garantizar una gran durabilidad.
Una piscina de poliéster es una piscina sin juntas, son totalmente fáciles de limpiar, por lo cual su mantenimiento es prácticamente nulo. Aparte, no tenemos ningún tipo de riesgo de corte, puesto que son totalmente lisas y completamente pulidas, su tacto es agradable. Son totalmente resistentes a las posibles inclemencias del tiempo, los rayos ultravioleta y sobre todo a los productos químicos que se usan para conseguir un buen mantenimiento de la piscina. Este tipo de piscinas, tienen diseños de última generación y con diferentes modelos para conseguir una perfecta relajación acuática. Pueden incluir dentro de la piscina asientos totalmente cómodos, aparte de diferentes opciones de hidromasaje como podría ser una cascada para un masaje cervical.
Ventajas de una piscina de poliéster
En primer lugar, una piscina de poliéster es una piscina mucho más económica, están comprobadas que tener una piscina de obra puede llegar a ser un 20% más caro que una de poliéster. Una vez solicitada, estas piscinas no necesitan ningún tipo de obra, es decir que su montaje se reduce por completo a la mitad de días, este tipo de piscinas están instaladas a los 2 o como máximo 3 días y en perfectas condiciones para poder disfrutar de ella. Al ser piscinas prefabricadas evitaremos por completo todo tipo de molestias que pueden crear el hormigón o mortero y sobre todo el polvo que se genera. Como hemos comentado antes, estas piscinas apenas tienen mantenimiento, puesto que la limpieza de ellas es muy sencilla y económica y no necesitan ningún mantenimiento especial, simplemente el de cualquier piscina.
Las piscinas de poliéster son piscinas monocasco, es decir que nunca sufriremos una fuga de agua. Aparte, estas piscinas se pueden desmontar y trasladarse a otra ubicación, es decir, que en caso de que tengamos este tipo de piscina instalada en nuestra vivienda y nos debamos mudar, la piscina podrá venir con nosotros a nuestra vivienda nueva, por lo tanto, la piscina siempre podrá venir con nosotros.